Tras el parto, durante el puerperio, es común sufrir algunas molestias, tanto físicas como emocionales. Son la consecuencia del estrés al que se ha sometido al cuerpo durante el proceso de dar a luz. Sin embargo, existen algunas señales que, lejos de ser normales, pueden estar indicando que se está produciendo un problema grave de salud y que pueden tratarse con ejercicios de suelo pélvico. Te explicamos cuáles son en este artículo.
Problemas postparto más comunes
- Sangrado vaginal.
Aunque el sangrado vaginal es un signo frecuente tras el parto, lo normal es que vaya disminuyendo con el paso de los días. Por eso, si pasadas 72 horas el sangrado no cesa y, además, es abundante, deberás acudir al médico de inmediato. Puede que se trate de una hemorragia posparto. - Hipertensión arterial.
Lo normal es que, tras dar a luz, las cifras de tensión arterial estén bajas. Por eso, cuando sucede lo contrario (sobre todo si se encuentran por encima de 140/90) debemos ponernos en alerta. Sabrás que estás sufriendo hipertensión arterial porque experimentarás síntomas como dolor de cabeza intenso e incluso destellos en la vista. - Fiebre.
Tras el parto, una leve febrícula (sin superar los 37,5º es normal). Sin embargo, cuando la fiebre supera estos grados, es posible que esté avisando de la existencia de un proceso infeccioso que podría estar localizado en las mamas, el útero, la episiotomía, la herida provocada en la cesárea o en la orina. - Dolor intenso.
El dolor en la zona abdominal, cuando es leve, puede ser un síntoma normal tras el parto (como consecuencia de la contracción del útero). Sin embargo, si este es repentino, muy agudo o se traslada a una pierna, puede indicarnos una complicación grave como una trombosis venosa profunda. - Molestias en las mamas.
Durante los primeros días de lactancia pueden experimentarse algunas molestias en las mamas, las cuales se encuentran inflamadas. Sin embargo, cuando estas molestias se vuelven insoportables o el pezón muestra zonas muy enrojecidas, calientes y agrietadas, debemos ser evaluadas por nuestro médico. - Dolor de cabeza agudo.
Si has recibido anestesia epidural, mucho cuidado con este síntoma. Un dolor de cabeza intenso puede indicar que existe una perforación en la membrana que retiene el flujo espinal. Aunque no es una complicación muy frecuente, cuando se da puede resultar muy molesta, por lo que es necesario acudir al médico de inmediato. - Incontinencia urinaria o fecal.
Durante el parto, se produce un estiramiento de los tejidos alrededor de la vejiga y la vagina que puede ocasionar incontinencia tras dar a luz. Si persiste el problema, deberemos acudir a un especialista para que nos indique qué cosas debemos hacer para reeducar el suelo pélvico. - Flujo vagina de mal olor.
El sangrado vaginal del posparto tiene un olor muy similar al del periodo menstrual. Por ello, si aprecias un olor diferente o te parece que este es malo, podría ser que estuvieses sufriendo una infección. - Tristeza.
Sentirse un poco triste tras el parto es absolutamente normal (guarda relación con las variaciones hormonales). Sin embargo, cuando existen emociones de tristeza y ansiedad muy intensas, puede que nuestro cuerpo nos esté avisando de que estamos sufriendo depresión posparto. No lo dejes pasar. Necesitas ayuda profesional para superarlo. - Dificultad respiratoria.
Mucho cuidado con este síntoma. Si te duele de forma intensa el pecho y además estás experimentando dificultad para respirar, cabe la posibilidad de que se haya producido un tromboembolismo pulmonar, por lo que debes acudir de inmediato a las urgencias del hospital.
Si estás sufriendo problemas de incontinencia urinaria tras el parto, en CRF Montigalà podemos ayudarte a solucionarlos. Ponte en contacto con nosotros sin compromiso y te explicaremos qué podemos hacer por ti.